Fui uno del montón, lo sé y a las pruebas me remito. Verano del 2007, el Madrid hace público el fichaje de Pepe, dos frases tan simples que creo que a mí y a todos se nos quedó grabado en la mente ¿No las recordáis? Os refrescaré la memoria... La primera es “Central Joven y con gran proyección”, la segunda es “30 millones de Euros”.
Todavía no salgo de mi asombro, no me lo puedo explicar cómo dudé de él. Generalmente ha sucedido siempre la misma historia, un club grande ficha a un jugador joven, que mundialmente no es muy conocido, que juega en el extranjero, con una gran proyección y un traspaso muy sonado y ese jugador no demuestra casi ni un 50% del diamante en bruto que lleva en su interior. Cada uno por diferentes motivos, pero al final no lo demuestran. Pepe es diferente.
El Madrid ha hecho fichajes muy malos, malos, decentes, buenos, soberbios, pero es que el de Pepe para mí es insuperable, es más me arriesgaría a decir inigualable ¿Por qué? Por muchos motivos:
Porque se esperaban cosas buenas de él pero no hasta llegar a este punto, porque en el Madrid pocos defensas extranjeros han triunfado, porque Pepe tiene de todo y bueno, es un central de 1,85 metros de altura, con una gran velocidad, saca el balón jugado, su juego aéreo es exquisito, hace coberturas a todos y cada uno de sus compañeros que las necesitan, tiene técnica, es un central que tácticamente siempre está bien colocado, un líder en defensa, sus cortes e intercepciones de balón son únicos.
Bajo mi punto de vista tiene un fallo y solo lo enmienda el tiempo, el temperamento en momentos claves. Pepe es bastante maduro en su juego y sus ideas, pero solo el tiempo nos dirá si este gran jugador llegará a ser perfecto.
Gracias.
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